La Casa Universal de Justicia nos ha instruido enviarles la copia adjunta de su mensaje de Ridván y transmitirles los consejos siguientes.
El mensaje es para ser difundido en Ridván durante su Convención Nacional y no debe ser circulado de forma general con antelación. Se les envía ahora para que tengan tiempo para su traducción, si fuera necesaria, y para organizar otros preparativos para las consultas de su Convención y la planificación del nuevo año administrativo. Para ello, pueden enviar copias del mensaje de forma confidencial a sus miembros, a los miembros de comités o a otros individuos cuya relación con tales preparativos sea fundamental. Se debe tomar especial cuidado para evitar que el mensaje aparezca en listas bahá’ís o foros de Internet antes del período en que se celebren las Convenciones Nacionales.
Con cariñosos saludos bahá’ís,Con corazones agradecidos aclamamos la entusiasta respuesta que desde todos los continentes se ha dado al Plan de Cuatro Años inaugurado el pasado Ridván.
Las consultas celebradas entre los Consejeros Continentales y las Asambleas Espirituales Nacionales dieron inicio a un amplio proceso de planificación, en el que participaron los miembros del Cuerpo Auxiliar y las Asambleas Espirituales Locales. A través de dicho proceso fueron cobrando forma y carácter los planes nacionales y regionales. Pero este ejercicio de alcance mundial ha producido algo más que los planes de los diferentes países: ha servido para potenciar la relación de colaboración entre los dos brazos del Orden Administrativo, hecho que celebramos como augurio de las victorias por venir.
Clara muestra del impacto inmediato causado por el Plan ha sido la rapidez con la que --en los últimos doce meses-- se han dado pasos para el establecimiento de casi doscientos institutos de formación. Buena parte de ellos, superada ya la etapa su organización, se encuentra en funcionamiento y ha ofrecido sus primeros cursos. Por otra parte, el movimiento de pioneros y profesores viajeros nacionales e internacionales, el aumento del interés de los creyentes por sufragar los gastos de los maestros, los preparativos para asegurar la formación de Asambleas Espirituales Locales sólo el primer día de Ridván, el aumento de esfuerzos por celebrar reuniones de oración regulares, el mayor número de iniciativas para usar las artes en la enseñanza y las actividades de la comunidad, en todos éstos ha podido apreciarse la aguda conciencia que los creyentes han cobrado de lo importante que es centrarse en los requisitos del objetivo principal del Plan, a saber: efectuar un avance significativo en el proceso de entrada en tropas.
Tampoco podemos dejar de reconocer otros logros cosechados durante el año y que confirman el gran mérito de los múltiples esfuerzos que está realizando nuestra comunidad mundial. Entre ellos, por mencionar sólo unos pocos, figuran: la adquisición del apartamento del número 4 de la Avenida de Camoens en París donde residió el amado Maestro, ‘Abdu’l-Bahá, durante Su histórica visita a la ciudad; la sesión especial que con fecha 14 de agosto quiso la Cámara Federal de Diputados de Brasil conmemorar el 75 aniversario de la llegada de la Fe Bahá’í a aquel país, una ocasión singular y oficial a la que asistió Amatu’l-Bahá Ruhíyyih Khanum como invitada de honor; la inauguración lanzamiento en julio del “website” de la Comunidad Internacional Bahá’í en la Red Informática Mundial WWW, bajo la denominación “El Mundo Bahá’í”, que hasta la fecha ha recibido más de 50.000 visitas de más de 90 países, a razón de 200 visitas diarias.
Difícilmente sobrepasados por tales logros, los proyectos del Monte Carmelo han mantenido un ritmo de construcción impresionante cuyos hitos más destacados han sido: la finalización de la columnata de mármol del Centro para el Estudio de los Textos, la erección del edificio del Centro Internacional de Enseñanza que ahora alcanza la séptima planta, y la manifestación cada vez más patente de los rasgos destacados de las Terrazas del Santuario del Báb. Entre éstos debe mencionarse la rebaja parcial del tramo de la carretera sobre la que ha de pasar la franja correspondiente de las terrazas, y la adquisición y subsiguiente demolición del edificio situado al pie de la montaña que permanecía último obstáculo que debía superarse para completar las terrazas inferiores que atraviesa el glorioso camino que se eleva hasta el Edificio sagrado y, más allá de éste, hasta la cresta de la Montaña de Dios.
Asimismo en el progreso ha tenido honda repercusión el mantenimiento del nivel de aportaciones al Fondo de los Proyectos del Arco que cumplió la meta establecida para el último año. Sin duda alguna, las exigencias económicas correspondientes se han visto cumplidas gracias al incesante heroísmo demostrado indistintamente por ricos y pobres, y que habrá de sostenerse durante los años restantes. Ello no obstante, las Asambleas y los creyentes de todo el mundo deben realizar al mismo tiempo un esfuerzo paralelo, no menos vehemente y continuo, a fin de responder a las vitales necesidades del Fondo Internacional bahá’í.
Tan auspicioso comienzo para el Plan de Cuatro Años como éste a que hemos asistido no puede por menos de infundir en el corazón de los miembros de nuestra comunidad mundial la confianza de que hallarse plenamente dotados para cumplir los requisitos resumidos en los mensajes que lo lanzaron y los planes adoptados por sus respectivas Asambleas han venido a recoger. Es motivo muy especial de aliento, en este segundo año, el que las circunstancias permitan en este Ridván el restablecimiento de la Asamblea Espiritual Nacional de Ruanda. Esta victoria sobre la crisis elevará a 175 el número de Asambleas Espirituales Nacionales elegibles para participar en la Octava Convención Internacional Bahá’í, que ha de celebrarse el próximo Ridván en el Centro Mundial Bahá’í. ¡Cuánto deseamos que para entonces, en el ecuador mismo del Plan, el mundo bahá’í haya dado un gran salto adelante en la multiplicación de sus recursos humanos, la maduración de sus Asambleas Espirituales y la evolución de sus comunidades locales!
Las oportunidades que ofrece el breve tiempo que resta hasta concluir el siglo carecen de parangón. Sólo el esfuerzo unido y constante de los creyentes de todas partes por hacer avanzar el proceso de entrada en tropas puede estar a la altura de tal momento histórico. Responsabilidades urgentes e ineludibles empujan a todas las instituciones y a cada uno de los miembros de la comunidad en su afán por alcanzar el destino prometido por Dios. Puesto que sólo queda poco tiempo y es mucho lo que falta por lograr, no cabe perder ni un instante ni dejar pasar oportunidad alguna. Sepan con certeza, queridos amigos, que las huestes del Reino de Abhá están listas para lanzarse en apoyo de quien se levante para ofrendar sus actos de servicio participando en el drama espiritual de estos portentosos días.
La Casa Universal de Justicia